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Los rebeldes unidos contra Anaya

La confrontación dentro del PAN para definir cómo se debe designar candidato presidencial del frente PAN-PRD-Movimiento Ciudadano es cada día más dura. Las diferencias entre las dirigencias partidarias y quienes quieren un método abierto de selección de candidato, que tendrá que definirse en las próximas semanas, son cada vez más amplias.

 

Platicamos Jorge Fernández y yo con los llamados “senadores rebeldes del PAN”: Jorge Luis Lavalle, Roberto Gil, Ernesto Cordero, Javier Lozano y Salvador Vega sobre su postura ante la próxima designación presidencial y cómo ven ellos lo que sucede al interior de su partido.

¿Por qué los rebeldes?, le preguntamos a Ernesto Cordero:

“Pues esto es reflejo de la cerrazón y de la falta de oportunidad que hay en el Partido Acción Nacional, donde todo aquel que no coincide con Ricardo Anaya está en su contra, es un exterminio político a todo aquel que difiera de él”.

El conflicto entre los llamados senadores rebeldes y la dirigencia partidaria inicia antes del tema de la designación presidencial, nos cuenta el senador Roberto Gil Zuarth:

“Surgió porque nosotros nos opusimos a la estrategia de bloqueo, de boicot a la instalación del Senado de la República. Había una orden de Ricardo Anaya de que no se instalara. Fue una estrategia de presión y nosotros consideramos que lo primero son las instituciones, México estaba entrando a la negociación del TLC y si no se instalaba el Senado en esa fecha entrábamos en una crisis constitucional y nosotros cinco decidimos concurrir a la instalación y también decidimos apoyar la presidencia de la Mesa de Ernesto Cordero; ahí nació, digamos, esta decisión dentro del grupo porque estábamos en contra de esa estrategia”.

Los senadores con los que platicamos coinciden en que si no están a favor de Ricardo Anaya, éste los considera traidores.

“Entonces pasamos a ser rebeldes, pero antes fuimos traidores, según ellos, con la amenaza de expulsión que todavía por ahí anda latente, lo cual es una gran intransigencia y una gran intolerancia, o sea, ¿cómo es posible que nos digan: ‘no vayan a pasar lista, que no haya quórum, no voten y no apoyen a un panista?’, cuando la Mesa Directiva le tocaba al PRI…”

Los llamados senadores rebeldes nos dicen:

“En el PAN y particularmente para muchos que nos consideramos de vocación panista las imposiciones son lo que no funciona y desde hace muchos meses en el PAN, particularmente Ricardo Anaya, todas las decisiones que salen de la dirigencia son a raíz o teniendo que ver con su candidatura a la Presidencia. Nosotros no estamos de acuerdo.

“Todo esto surge porque querían hacer una crisis en nuestra institución, querían dejar sin gobernabilidad al Senado y contra eso es contra lo que nos opusimos y por eso nos decían traidores, nosotros pensamos que fue todo lo contrario y no estamos de acuerdo con esas imposiciones ni con esos juegos populistas. Es absurdo y ridículo que el PAN haya caído en ese tipo de prácticas”.

¿Qué es lo que viene mirando hacia el futuro?, ¿si se va a establecer o no realmente un Frente PAN-PRD-Movimiento Ciudadano?, les preguntamos y Javier Lozano responde:

“En el PAN estamos pasando por una crisis tremenda y no solamente en el Senado, también dentro de la militancia hay mucha gente inconforme por las imposiciones que ha hecho Anaya, parece ser. Por lo que se ve, también en el Frente van a hacer esas imposiciones, es decir, el candidato va a ser fulano de tal o con un método verdaderamente a modo para que sea Ricardo Anaya, todo parece indicar eso; eso por supuesto que no solamente va a significar la muerte del Frente, va a significar una grave herida al PAN. En el PAN no estamos acostumbrados a esas imposiciones”.

¿Ustedes no van a renunciar al PAN, como lo hizo ya Margarita Zavala?

“No, yo no pienso renunciar, el partido es mucho más que Ricardo Anaya y regresando al otro tema, la única manera que tiene el Frente de salvar la cara y de que verdaderamente se convierta en un Frente ciudadano es que la elección del candidato sea hecha por los ciudadanos.

“Otra de las cosas que está dañando tanto al partido es que están decidiendo designar prácticamente en todo el país a los candidatos y quitándole a los panistas los derechos que tienen y que han ejercido, que hemos ejercido siempre, de escoger a nuestros candidatos”.

“El PAN está secuestrado por esta dirigencia y si nos quedamos es para precisamente regresar a los motivos por los cuales somos panistas”, afirma Salvador Vega.

Javier Lozano es otro de los que se sienten traicionado:

“Hace de la traición una presión y a mí me consta en carne propia. Cuando me pidió el apoyo y que públicamente lo expresé, el primero que lo apoyó en Querétaro fue Roberto Gil y eso nos generó tensión y molestia con otros panistas que también tenían otro tipo de preferencias, nos la jugamos con él públicamente, pero yo sí le dije viéndolo a los ojos: ‘Júrame que nunca se te va a ocurrir siendo el presidente del partido, porque dicen que se te va a antojar, querer ser el candidato a la Presidencia’, ‘no, Lozano, por el amor de Dios, me conoces, faltaba más, te lo prometo, te lo juro…’”

El senador Jorge Luis Lavalle también se dice traicionado por Anaya:

“Cuando la candidatura de Campeche, por escrito firmamos un acuerdo que tenía supuestamente en su caja fuerte, según me dijo, y no cumplió nada, ni por escrito ni de palabra, es un tipo que absolutamente no cumple nada”.

¿Cuál es la diferencia entre la toma de decisiones de dirigencias pasadas y ésta?

“Te voy a decir la enorme diferencia, antes las estrategias y las cosas se pactaban basadas en temas específicos del país, el presupuesto, bueno, hay que lograr solucionar estos problemas, hay que apoyar esta situación que está pasando, hay que generar fondos para estabilidad, en materia de seguridad, o sea, los temas iban enfocados a resolver un tema de repercusión para el país con la vocación de nosotros; ahora todos los temas van enfocados: el presupuesto, ¿cómo hacemos candidato a Anaya?, la Ley de Seguridad, ¿cómo hacemos candidato a Anaya?, o sea, ya todo se prostituyó de tal manera que no tiene sentido”.

Y lo más triste, con esta confrontación de la dirigencia partidaria con otros partidos es que el país está literalmente atorado.

“No se está generando política anticorrupción, están atorados 62 nombramientos en el Senado, no hay Ley de Seguridad Interior, sobre todo los gobernadores del PAN suplicando que pasen todas estas reformas”.

El TUCA (Todos Unidos Contra Anaya) ya es una realidad, falta saber si tendrá éxito.