“El rechazo de la gente hacia el PRI es mayor al que imaginábamos”: Un Café Con Ricardo Anaya

Pasión y perseverancia son dos palabras con las que se define Ricardo Anaya, actual dirigente nacional del PAN y con 37 años, el más joven en ocupar este cargo. Su carrera inició tempranamente, a los 18 años combinó sus estudios universitarios y su labor como director del Instituto Municipal de la Juventud, en Querétaro. Ése fue el comienzo para el político que no es el prototipo tradicional que se desvela y pasa poco tiempo con la familia: practica yoga y su esposa e hijos, dice, son “su debilidad”. Ahora, rumbo al 2018, su meta es que Acción Nacional regrese a Los Pinos, por ello, “me gustaría conservar la posibilidad de ir en alianza con otros partidos”, afirma en esta entrevista que realicé con Jorge Fernández Menéndez. Y aunque es uno de los favoritos para ser presidenciable de su partido, asegura: “No me debo desconcentrar, tengo que dar un buen resultado”.

Pregunta: ¿Cuáles fueron los resultados de las alianzas que hicieron con el PRD en las pasadas elecciones?

Respuesta: (Sin ellas) No habríamos ganado Durango, Veracruz y Quintana Roo, la conclusión es: las alianzas funcionan y llegaron para quedarse. También debo decirlo, hubo otros tres estados en los que fuimos sin alianza, el caso de Chihuahua, de Tamaulipas y de Aguascalientes, competimos sólo con el PAN y ganamos de manera contundente. Hay dos reflexiones: uno, el PAN tiene fuerza, puede apostar por sí mismo. Pero no hay duda de que maximizamos de manera importantísima las posibilidades de triunfo cuando sumamos fuerzas con otros partidos y yo le reconozco al PRD una contribución fundamental en estos triunfos. Empezando por Veracruz, el tercer padrón electoral más grande del país, donde seguiría gobernando el PRI si no hubiéramos ido en alianza.

 

El proceso electoral del año que entra es muy importante, con tres estados que cambian gubernatura, Estado de México, Nayarit, Coahuila y el caso de Veracruz que tiene elección para renovar todas las presidencias municipales. ¿Me gustaría conservar la posibilidad de ir en alianza?: definitivamente, sí. Estamos abiertos a llegar en alianza con otros partidos, sin olvidar que la principal alianza es con los ciudadanos, con la gente, con las causas de la gente, colocarnos en el lugar correcto en el debate público, pero por supuesto que sí.

 

Pregunta: Si el PAN o los gobiernos panistas o los que han surgido de las elecciones del 5 de junio, no tienen resultados muy rápidos, en un contexto además en que el Gobierno federal está teniendo dificultades también para sacar adelante sus cosas, se puede generar un vacío, el peor de los vacíos que es el de las esperanzas, ¿no?

 

Respuesta: De cara al 2018, creo que el voto de castigo contra el PRI va a ser enorme, lo vimos en la elección pasada, creo que el rechazo de la gente es mucho mayor de lo que todos nos imaginábamos. Por el otro lado, los ciudadanos no solamente decidieron no votar por el PRI, tomaron dos decisiones: no votar por el PRI y darle su confianza a una alternativa de cambio sensato, responsable, que es el PAN. Morena no ganó ninguna de estas elecciones, pero de cara a la elección del 2018, si nosotros fallamos en estos gobiernos, si no estamos la altura de las expectativas de estos 40 millones de mexicanos que van a tener un gobernador emanado del PAN, el panorama podría cambiar. Podríamos provocar que la gente decida no votar por el PRI, pero voltear a ver otra alternativa distinta, que no sea el PAN. Por eso, estoy entusiasmado, porque, como nunca, el futuro del PAN está en nuestras propias manos. Si hacemos bien las cosas, si damos resultados rápido, como tú lo señalas, en estos 11 estados que vamos a gobernar, no tengo duda de que llegamos al 2018 con una condición inmejorable, con una garantía para los ciudadanos de que sí hay posibilidad de un cambio que no sea un salto al vacío —que es lo que representa Morena y el proyecto de López Obrador— sino un cambio, pero un cambio sensato, responsable, un cambio para mejorar, un cambio para darle a México lo que se merece, un gobierno honesto y de resultados.

 

Pregunta: ¿Te gustaría contender por la Presidencia de la República?

 

Respuesta: No creo que sea momento de definirlo, creo que no me debo de desconcentrar, tengo que dar un buen resultado. Primero, para cerrar bien 2016, de las siete elecciones que ganamos, cinco las tenemos impugnadas; sacar un buen resultado electoral el año que entra con la elección del Estado de México, Nayarit, Coahuila y Veracruz; y ya habrá tiempo de platicar el 2018 cuando sea el tiempo oportuno.

 

Pregunta: Pasemos a la entrevista más personal. Creciste en Querétaro, ¿cómo fueron esos años?

 

Respuesta: Nací en la Ciudad de México y muy chiquito me fui a vivir a Querétaro, me siento queretano, porque en esa entidad estudié la primaria, la secundaria, la prepa, estudié en la universidad pública del estado. Le debo todo a Querétaro y le tengo una enorme gratitud.

 

Pregunta: ¿Tus abuelos, toda tu familia se queda aquí en la Ciudad de México?

 

Respuesta: No, eventualmente ellos también se van a Querétaro, mis abuelos maternos, dos arquitectos ya retirados. Y mis abuelos paternos ellos sí se quedan en la Ciudad de México.

 

Pregunta: ¿Tu papá en qué trabajaba en Querétaro?

 

Respuesta: Es ingeniero químico se dedicó a esto al inicio de su profesión, después incursionó en la industria del calzado; fabrica y vende sobre todo zapatos. Mi mamá es arquitecta, durante muchísimos años se dedicó fundamentalmente a construir y vender casas habitación. Curiosamente en mi familia nadie se dedicaba a la política, ni por aquí les pasaba que alguien se iba a dedicar a esto.

 

Pregunta: Y, ¿de dónde surge tu interés por la política?, porque tampoco empiezas estudiando Ciencias Políticas, inicias estudiando Derecho.

 

Respuesta: Siempre tuve claro que a eso me quería dedicar. Cuando escojo ser abogado, me estaba preparando para el servicio público. Siempre pensé que desde cualquier profesión se puede hacer el bien: el médico puede curar a los pacientes que lo van a ver, y el arquitecto puede construir casas para que la gente viva. Siempre he creído que el espacio desde el que se puede hacer muchísimo bien a los demás, donde realmente se le puede cambiar la vida a miles y millones de personas desde algunas responsabilidades; o dicho al revés, donde quien ejerce mal la profesión afecta y destruye la vida de miles y de millones, es desde la política.

 

Pregunta: ¿A los cuántos años acabas la carrera?, porque a los 21 años ya eres diputado.

 

Respuesta: En realidad entré a los 18, siempre combiné el trabajo con la política y muchas cosas las hice siendo estudiante.

 

Pregunta: Antes de los 21 años, para llegar a ser diputado, ¿qué hiciste?

 

Respuesta: Cuando entro a la carrera, esto es a los 18 años, trabajo con quien fue el primer presidente municipal panista en Querétaro, Paco Garrido, yo era el director del Instituto Municipal de la Juventud. Muy temprano en las mañanas iba a la facultad y saliendo me iba a la oficina. Después, en el propio gobierno municipal, en la siguiente administración, fui director de Vinculación Social de Seguridad Pública, una responsabilidad que me marcó mucho porque era responsable de hacer todas las reuniones con los vecinos, de escuchar los problemas de seguridad que vivían, toda la instalación de los módulos con un modelo que teníamos en aquel entonces que se llamaba Policía de Barrio. Me permitió entender el problema de la seguridad, no en macro sino el problema diario, lo que la gente vive y padece todos los días.

 

Pregunta: Después te vienes a la Ciudad de México, haces una maestría en Derecho Fiscal, terminas también un doctorado en Ciencia Políticas en la UNAM. ¿Con mención Honorífica? ¿Eras muy nerd o qué?

 

Respuesta: Sí, la verdad es que siempre he sido estudioso. Soy apasionado, me meto en las cosas y cuando me propongo algo, lo hago a fondo y lo hago en serio, entonces, sí fui medio nerd en mis épocas de estudiante.

 

Pregunta: Ahora te has propuesto a hacer ejercicio, vi unas fotos tuyas donde te sostienes con una mano haciendo yoga.

 

Respuesta: Me gusta mucho, creo que el yoga es una buena combinación.

 

Pregunta: Pero eso es dificilísimo, ¿no?

 

Respuesta: Creo que ayuda mucho porque es un balance de tres cosas. No hago yoga desde ninguna creencia sobrenatural, lo hago por el ejercicio de concentración que permite el tema de la respiración; por la elasticidad, la flexibilidad que es buena para el cuerpo; y la fuerza. Creo que es un ejercicio muy completo y sí, procuro practicarlo con la mayor frecuencia posible.

 

Pregunta: También es un tema de retos, ¿no? Me voy a concentrar para poderme parar de cabeza, así eres en la vida real, me voy a concentrar y quiero ser diputado, quiero acabar la carrera con mención honorífica, eres muy tenaz, ¿no? ¿Se tienen que hacer las cosas como tú quieres?

 

Respuesta: Estoy convencido de que en la vida un tema fundamental es además de ser apasionado, es ser muy perseverante, creo que hay que tener objetivos clarísimos y perseguirlos con toda fuerza. Si algo pudiera transmitirles a mis hijos que, por cierto, tengo tres, sería eso, que escojan en absoluta libertad lo que a ellos les guste y lo hagan con muchísima pasión; que cuando empiecen las cosas las terminen y que hagan un esfuerzo serio por dar lo mejor de ellos mismos en lo que ellos quieran y, es lo que intento en mi propia vida.

 

Pregunta: ¿A los cuántos años te casaste con Carolina?

 

Respuesta: Me casé joven, a los 26, fuimos novios desde la prepa.

 

Pregunta: Ella es administradora, ¿no?

 

Respuesta: Sí, ella estudió Administración de Empresas, trabajó mucho con su papá al principio, él se se dedica al ámbito de los hoteles y restaurantes, y ahora ella se dedica ciento por ciento a la familia, a estar al pendiente de los hijos, a la casa, eso es a lo que se dedica de tiempo completo.

 

Pregunta: Oye, ¿le gusta la política?

 

Respuesta: Es un balance bien bonito porque le apasiona ver lo que hago, pero en la casa no nos dedicamos a hablar de eso, hablamos de otros temas, la conversación central suelen ser los niños, eso te da un buen balance.

 

Pregunta: ¿A poco llegas en la noche, y ya a punto de dormirse y no te pregunta: ¿‘Oye, sí has pensado en el 2018’?, ¿nada?

 

Respuesta: Siempre me pregunta y le platico muchísimo de lo que hago, se involucra en términos de apoyo, pero me permite tener el balance de poder cambiar de tema, es una relación muy equilibrada la que tenemos.

 

Pregunta: ¿A qué hora ves a tus hijos?, ¿qué haces?

 

Respuesta: Ésa es mi fascinación en la vida. Mi debilidad, en el buen sentido de la palabra, es mi familia, el espacio, el refugio, lo que más cuido. Estoy convencido de que, esta idea del político tradicional, de que hay que trabajar hasta altísimas horas de la noche, tener a la familia completamente descuidada y cada vez que dan un informe abren pidiéndole perdón a la familia por todo el tiempo que le han quitado, yo, francamente, no creo en eso. Creo que hay que ser equilibrados y que la familia requiere tiempo, esfuerzo, que, si uno quiere ayudar al país, lo primero que tiene que hacer es formar bien a sus propios hijos para que sean buenos ciudadanos. De tal manera que, para mí, es una altísima prioridad, en términos de convicción, pero también de disfrute. No disfruto nada más en la vida, si ahorita me dijeras tienes un día libre, qué quieres hacer con él: estar con mi esposa y con mis tres hijitos.

 

Pregunta: ¿En dónde?

 

Respuesta: Nos gustan muchísimo las actividades en el exterior, si ahorita tuviera que escoger algo, se me antojaría un paseo largo en bicicleta. Santiago y Mateo, aunque están chiquitos son buenos para la bici, tienen sus bicis de velocidades y toda la cosa; Carmen, en mi bici tiene una sillita especial.

 

Pregunta: ¿Quiénes han sido tus grandes maestros políticos?

 

Respuesta: Sin duda, el gran ejemplo para mi generación en el PAN fue don Luis H. Álvarez —quien murió hace poco— porque combinó, por un lado, un político muy bien formado, que ocupó cargos muy importantes y que toda su vida se mantuvo con una rectitud absoluta, es decir, murió a sus más de 90 años después de haber ocupado distintos cargos importantísimos. Fue presidente nacional del PAN, fue alcalde en su municipio, fue candidato a presidente de la República, sin una sola acusación de corrupción.

 

Pregunta: ¿De tus jefes directos?

 

Respuesta: Fue un hombre que jamás se enriqueció de manera ilícita, no tendría duda en decirte, Don Luis, como el gran referente de a lo que yo aspiraría.

 

Pregunta: Pero eso es aspiracional, generacionalmente es muy distinta, por ejemplo, con quien hayas trabajado.

 

Respuesta: Paco Garrido quien fue gobernador de Querétaro, fui su secretario particular. Sin duda, un referente, un hombre con un pensamiento ordenado como pocos que haya podido conocer, con una enorme capacidad para resolver problemas. La verdad es que Querétaro durante el tiempo que él gobernó y que tuve la oportunidad de acompañarlo, estuvo muy bien en términos de seguridad, de crecimiento económico, de infraestructura. Sí, le aprendí mucho a Paco.

 

Pregunta: Tienes otros personajes cercanos ahorita, por ejemplo, Santiago Creel, Gustavo Madero, ¿a ellos?

 

Respuesta: De todo mundo se aprende, cada vez que uno tiene la oportunidad de tener una discusión con otra persona hay algo que aprender. No me gusta idealizar a las personas porque creo que todos tenemos algo que aportar, no creo en el blanco y en el negro, sino que son pocos los personajes como Don Luis, que son casi puras luces, la mayoría de los seres humanos son una combinación de luces y sombras con tonos de gris. Más que idealizar a un personaje y decir: ‘Éste es mi gran referente y yo haría todo lo que esta persona diga’, procuro ir tomando lo mejor de cada quien y en conjunto tomar las mejores decisiones en las responsabilidades que tengo.

 

Pregunta: Sí, porque finalmente en la vida, bien como dices tú, no es ni blanco ni negro, hay un montonal de matices alrededor y así tiene que ser, sino imagínate qué aburrido sería.

 

Respuesta: Y los seres humanos así somos, tenemos virtudes, defectos. Entre más alto sea el nivel de conciencia que uno tenga para reconocer sus propios defectos, para acompañarse de gente valiosa que ayude a tomar buenas decisiones, creo que mejor le va a uno en la vida.

 

Pregunta: Entre más alto sea el nivel que alcances, ¿más enemigos tienes?

 

Respuesta: Creo que no necesariamente, si uno se conduce con honestidad, porque efectivamente, en ciertas responsabilidades; por ejemplo, aquí en la dirigencia Nacional, se toman decisiones dificilísimas cuando tenemos procesos internos. Yo sé que desde afuera, por ejemplo, déjame tomar el caso de Chihuahua, donde el candidato fue Javier Corral, había seis aspirantes originalmente, estábamos sentados en la mesa con todos ellos que cuentan con trayectorias muy importantes, ir tomando decisiones; ir encaminando los procesos, por supuesto que tiene costos. Pero cuando se le habla a la gente de frente, viéndola a los ojos, con honestidad, empeñando la palabra y cumpliendo la palabra empeñada, puede haber momentos en los que no se comprenda la decisión, pero no queda un agravio que implique una enemistad. Yo trato de no tener enemigos y no tener odios.

 

Pregunta: A ver, Ricardo Anaya, ¿cuál ha sido el día más feliz de tu vida?

 

Respuesta: Es difícil escoger un día, porque sí lo asocio definitivamente a cuando me casé y cuando nacieron mis hijos. Pero no dejan de ser procesos, porque llevaba ocho años de novio con mi esposa y la boda se planea con tiempo. La boda es el momento en el que se sintetiza ese amor de novios extraordinario y el nacimiento de los hijos es el inicio de la parte más bonita de la vida. A mí no me ha pasado algo mejor, a lo mejor habrá quien diga: ‘El día que gané una elección’. No, para mí, por encima de cualquier logro profesional, está el tema de la familia. Después de ésos dos, probablemente el día que fui electo presidente nacional del PAN, porque es la responsabilidad más importante que he tenido en términos públicos y es la responsabilidad más grande que he tenido para poder construir el bien común que es a lo que aspiro en esta chamba.

 

Pregunta: ¿El más triste?

 

Respuesta: Cuando se murió mi abuela materna, la quise muchísimo, fuimos cercanísimos, fue una mujer a la que le tuve una profunda admiración, siempre he creído que estaba adelantada a su tiempo, era una profesionista, una mujer muy brillante, arquitecta. Murió a los 80 años, todavía con una obra pendiente, ella seguía yendo a supervisar sus propias obras y fue un poquito trágico porque estaba muy bien de salud, estaba ella fumigando, porque ella hacia todo por su cuenta, se cayó y a mí me tocó encontrarla, el impacto fue muy fuerte, sí lo recuerdo como un día muy duro. Era un domingo e íbamos a ir a comer, fui a su casa a recogerla y cuando entré la encontré.

 

Pregunta: ¿Y qué hiciste?, ¿le hablaste a la ambulancia?, ¿ya sabías que había fallecido?

 

Respuesta: No falleció en el momento, estaba completamente inconsciente, pero llamamos a la ambulancia y llegó al hospital, fue un proceso difícil de unas cuantas semanas, ya nunca recuperó bien la conciencia y finalmente se nos fue. Pero la recuerdo con enorme gusto y como alguien que fue un ejemplo de tenacidad y sobre todo de honradez, una mujer verdaderamente de primera en términos de valores.

 

Pregunta: Complétame esta frase, Ricardo Anaya es…

 

Respuesta: Muy apasionado, en lo que creo que debo hacer, pongo todo mi esfuerzo, todo mi entusiasmo. Y alguien que trata de superarse todos los días.