¿Da tiempo para la segunda vuelta electoral?
Esta pasada elección nuevamente nos mostró que los candidatos a gobernar están ganando con márgenes muy cerrados. En el caso del Estado de México la elección estuvo cerradísima.
El 70 por ciento del electorado no votó por el candidato del PRI, y ya se habla de una impugnación por parte de Andrés Manuel López Obrador.
En el caso de Coahuila la situación es aún más crítica. Todavía no se ha podido declarar oficialmente un ganador.
Y es que cuando se gana con márgenes tan cerrados, el grave problema es cómo se gobierna después de la elección.
La analista María Amparo Casar ha hablado de las ventajas de una segunda vuelta electoral. Afirma que da un mayor margen para la gobernabilidad. Ningún presidente llegaría con más oposición que apoyo. Permite a los electores un voto estratégico: optar por su segunda preferencia, evita que llegue el candidato menos preferido o la emisión de un voto útil.
Y dice que se tiene el potencial de formar coaliciones que rebasen el momento electoral y evitar un bloqueo sistemático en el Congreso a un presidente que obtenga una votación muy reducida.
La segunda vuelta tiende a favorecer a los candidatos moderados, aquellos que se alejan de los extremos y que permiten una mejor convivencia política.
¿Todavía se está a tiempo para aprobar las leyes que permitirían la segunda vuelta electoral?
Los expertos difieren entre sí, María Amparo Casar es de las que cree que todavía hay tiempo de poder hacerlo.
“A poco menos de 90 días antes de que comience formalmente el proceso electoral 2018 la posibilidad de hacer esta reforma sigue abierta. Lo pienso porque el artículo 105 de la Constitución dice a la letra: “Las leyes electorales federal y locales deberán promulgarse y publicarse por lo menos noventa días antes de que inicie el proceso electoral en que vayan a aplicarse, y durante el mismo no podrá haber modificaciones legales fundamentales”.
“Esta redacción se ciñe únicamente a las leyes electorales, mas no a la Constitución. El artículo 81 podría ser modificado por el constituyente permanente para añadir, como en muchas constituciones de América Latina, lo siguiente: ‘El Presidente será electo en votación directa y por mayoría absoluta de los sufragios válidamente emitidos. Si ningún candidato obtuviera más de la mitad de los sufragios válidamente emitidos, se procederá a una segunda votación entre los dos candidatos que hayan obtenido las dos más altas mayorías relativas y en ella resultará electo aquel que obtenga mayor número de sufragios. La segunda vuelta se llevará a cabo ‘x’ días a partir de la declaración de los cómputos oficiales’”, señala.
Federico Reyes Heroles me dice que ya no hay tiempo para aprobar la segunda vuelta electoral, pero sí para plantear gobiernos de coalición.
“No, porque se hubiera tenido que modificar la Ley Electoral antes del 31 de mayo, o sea la semana pasada, eso ya se nos fue, pero lo que no se nos ha ido es la posibilidad, y eso no está a discusión, de que se formen gobiernos de coalición”, asegura.
“¿Cómo son los gobiernos de coalición? Esos ya están contemplados en la Constitución y entran en vigor a partir del primero de diciembre del próximo año.
“Los gobiernos de coalición, que por cierto se deja bastante libre la redacción de esos acuerdos, los partidos políticos se reúnen para el elaborar una ruta de viaje para los próximos 3 años, en el caso de un régimen como el de México, y entonces tú estableces que el partido tal se va a encargar de la Secretaría tal y de cumplir con tales y cuales metas, dependiendo de qué partido tenga mayoría, se hace la distribución de las carteras y se hace la distribución de los temas”, explica.
Le cuestioné a Reyes Heroles: Ya hay coaliciones, pero no se han respetado esos acuerdos, ¿verdad?
“Así es, la tristeza es ésa, que no han servido entre otras cosas porque, de alguna manera, no han sido formalizadas estas coaliciones; también de hecho tú podrías analizar el Pacto por México como una especie de coalición y decir, muchas personas lo dijeron, ‘bueno, van a cogobernar los priistas con acuerdos que se firmaron en los primeros días del gobierno con el PAN y el PRD’, y esos acuerdos ya habían sido pactados y elaborados previamente, sin embargo no hubo distribución de carteras, entonces la responsabilidad seguía cayendo en uno solo…, en el titular del Ejecutivo en particular, en un solo partido.
“Ahora, lo que es muy interesante es que hay personas que dicen que las coaliciones de gobierno son un freno para lograr acuerdos legislativos, lo que muestra la literatura es lo contrario, que tú logras coaliciones de gobierno sensatas en el momento de plantear las modificaciones de ley que se hacen necesarias para cumplir esos acuerdos que de alguna manera ya tus contrapartes están obligadas a ir a esas discusiones”, asegura.
Reyes Heroles agrega: “En América Latina hay 16 países que tienen segunda vuelta y sólo 4 países que no la tienen, lo cual ya te indica el grado de aislamiento, de cómo nos hemos ido quedando rezagados sobre el tema”.
Si hoy en México no tenemos una segunda vuelta electoral, que podría garantizar la gobernabilidad del país, es por la desidia de acordar las leyes.
Hemos tenido problemas con este tema desde hace años. Hace falta recordar el caos social que vivimos cuando el Presidente Calderón ganó con tan sólo .56% de los votos de diferencia. La historia se está repitiendo ahora en Coahuila.
Y mientras no se defina nuestro sistema electoral, el problema de la gobernabilidad en México, cada día será más complejo.
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