Mujeres contra delincuentes
Como mujeres, abrirnos espacios es muy complicado, y más en instituciones donde el trabajo del hombre predomina. Hasta hace diez años, ser mujer y trabajar en el área operativa de la Policía Federal era poco común.
La semana pasada se cumplió el 10° Aniversario del Agrupamiento Femenil División de Fuerzas Federales. Hoy, las mujeres hacen labores importantes de rescate, en la policía antimotines y en operativos especiales.
Recorrí las instalaciones del cuartel conocido como CONTEL, donde se hacen las prácticas y el adiestramiento, para conocer la labor de las mujeres en la Policía Federal. Platiqué con la comandante Elizabeth Villa, quien se encuentra en el área de apoyo a la gente y dentro de la cual se encuentra el grupo de rescatistas.
Ella me explicó que, por ejemplo, cada grupo de rescate está integrado por siete elementos, cuya preparación, resaltó, se lleva a cabo preferentemente en la calle y en exhibiciones, las cuales nunca son comparables con la experiencia que obtienen cuando salen a la vida real.
Así, las acciones para las que están preparadas las rescatistas van desde cortar la lámina de un coche, atender a un herido de bala, sacar a una persona de un auto que esté en llamas, etcétera.
“Igualmente contamos con paramédicos que están en constante preparación, ya que los protocolos también están en constante cambio”, comentó Villa.
En la ultima década, la presencia de las mujeres en la PF se ha incrementado poco a poco. Ahora, 159 forman parte de este agrupamiento.
“Ya realizamos prácticamente todas las acciones que hacen los hombres en las tareas de seguridad, apoyo y rescate, sin ninguna distinción. Cargamos equipo antimotín y hasta armamento”, agregó.
También fui testigo de una exhibición para conocer la forma en que las mujeres forman parte de los trabajos de rescate. Usan casco, goggles, chaquetón, guantes, pantalón y botas cuando deben acudir a un accidente automovilístico.
“Se debe hacer una inspección de 360 grados al auto accidentado para eliminar riesgos de que se esté derramando combustible y completar la evaluación del accidente”.
Es entonces que las rescatistas proceden a estabilizar el auto y así les sea más fácil rescatar a una víctima. Me fue posible ver cómo utilizan dos herramientas básicas en estas acciones: el expansor y la cortadora. Dichas herramientas pesan en promedio 14 kilos, aunque, pasado un tiempo, el éxito de su manejo está más en la maña que en la fuerza.
El objetivo es localizar un acceso que permita a las rescatistas tener contacto con la víctima.
Otra de las modalidades de rescate que realizan es a rapel. Con esta técnica se logró descender de edificios dañados en los pasados sismos de septiembre para verificar que no hubiera más víctimas atrapadas.
Una de las rescatistas, Gaby, quien domina el rapel y ha auxiliado a la población en casos de incendios e inundaciones, me dijo emocionada: “Amo mi trabajo, amo poder rescatar y auxiliar personas”, aunque muchas veces su vida corra peligro.
Otra de las áreas fundamentales en las que participa la mujer en la Policía Federal, es en las labores antimotines.
La comandante Alejandra Abud habló de las complicaciones de esta labor: “Es muy riesgoso, muchas veces se juega uno la vida; sin embargo, todas las compañeras tienen una amplia capacitación gracias a la que se sacan generalmente las acciones con éxito”.
También narró que algunos de los momentos más complicados se dan cuando reciben agresiones por parte de los grupos anarquistas, los que nunca se detienen a considerar que son mujeres, pero a partir de ahí desarrollan sus estrategias para repeler los ataques.
“Hemos recibido agresiones con palos, piedras, bombas molotov y afortunadamente siempre he salido bien librada, porque tengo una familia, a mis hijos que me esperan en casa”, me comentó Leticia Parra, integrante del grupo.
A pesar de que los agrupamientos están totalmente definidos en sus ramas varonil y femenil, con el objetivo de afinar detalles de estrategia, ambos sectores llegan a trabajar juntos en las instalaciones de la PF.
“Muchas de las mujeres que están con nosotros tienen una triple misión cotidiana, pues aparte de ser madres, muchas ya son esposas y se ganan la vida como servidoras públicas”, agregó Abud.
Pasaron los años en que las mujeres eran contratadas únicamente para labores de cocina, limpieza o administrativas, y ahora pueden trabajar en áreas operativas.
Cuando le pregunté a Abud sobre la dificultad de dar órdenes a hombres siendo mujer, aceptó que es complicado cuando no se tiene dominio de lo que se está pidiendo, “pero cuando existe convicción y don de mando, se pueden lograr las cosas”.
Otra de las oficiales, Cristina, me contó que a la corporación “le ha preocupado concientizarnos sobre los temas de género tanto a hombres como a mujeres, lo cual, en nuestro caso, nos ha permitido empoderarnos y elevar los alcances de las mujeres en la institución”.
Es un mundo de hombres en donde finalmente la mujer ha logrado abrirse camino, para poder trabajar en apoyo a la sociedad. Todavía se pueden abrir más espacios, pero por algo se inicia, y desde hace diez años se ha empezado a construir un espacio para la mujer en áreas operativas en la Policía Federal.
Engrandecen a la PF
Durante la celebración del 10° Aniversario del Agrupamiento Femenil División de Fuerzas Federales el pasado 12 de diciembre, el comisionado general de la Policía Federal, Manelich Castilla Craviotto, reconoció la perseverancia de las mujeres de la corporación, cuya labor es pilar de la institución y la engrandece con su profesionalismo, valentía, capacidad y responsabilidad.
El comisionado expresó su orgullo hacia este agrupamiento y recordó a las mujeres que han arriesgado su integridad en las actividades de restablecimiento del orden público con una actitud inquebrantable, reflejo de su vocación para salvaguardar la sociedad.
En el año 2007 se creó el primer agrupamiento femenil de la corporación ante el incremento de manifestaciones en las inmediaciones de dependencias gubernamentales, en las cuales se identificaban cada vez mayor número de mujeres que mostraban resistencia a la autoridad.
Actualmente son 159 mujeres policías que pertenecen a la Coordinación de Restablecimiento del Orden Público, de las cuales 98 se están certificadas en el estándar de competencia ECO510 Restablecimiento del Orden Público y el resto se encuentra en proceso.
En el marco de este evento se entregaron reconocimientos a las mujeres que han permanecido en este agrupamiento desde su origen, se inauguró un lactario y se develó un Monumento a la Mujer Policía. Asimismo, se realizó una exhibición con movimientos de coordinación para el control de multitudes además de una demostración de rescate y salvamento.
